El Viaje

TEMA 10 – Fiel al Padre

Mateo 4,1-11

Entonces Jesús fue llevado al desierto por el Espíritu, para que el diablo lo pusiera a prueba. Después de ayunar cuarenta días y cuarenta noches, sintió hambre.
El tentador se acercó y le dijo:
—Si eres Hijo de Dios, manda que estas piedras se conviertan en panes.

Jesús le respondió:
—Está escrito: No solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

Después el diablo lo llevó a la ciudad santa, lo puso en el alero del templo y le dijo:
—Si eres Hijo de Dios, tírate abajo; porque está escrito: Dará órdenes a sus ángeles para que cuiden de ti y te lleven en brazos, de modo que tu pie no tropiece en piedra alguna.

Jesús le dijo:
—También está escrito: No tentarás al Señor, tu Dios.

De nuevo lo llevó consigo el diablo a un monte muy alto, le mostró todos los reinos del mundo con su gloria y le dijo:
—Todo esto te daré si te postras y me adoras.

Entonces Jesús le dijo:
—Vete, Satanás, porque está escrito: Adorarás al Señor, tu Dios, y solo a él le darás culto.

Entonces el diablo se alejó de él y unos ángeles se acercaron y le servían.


  • Guía de Lectura

Jesús vive movido por el Espíritu de Dios, que dirige toda su vida. Pero su fidelidad al Padre no siempre será fácil, pues estará atravesada por pruebas, tentaciones y conflicto. Vamos a tomar conciencia de los caminos equivocados que hubiera podido seguir Jesús pervirtiendo su misión. De esta manera conoceremos mejor su fidelidad al Padre y podremos estar más atentos a las tentaciones que nos pueden desviar hoy del camino.

Acercamiento al texto evangélico 
Las tentaciones de Jesús. ¿Estamos convencidos de que Jesús tuvo que superar graves tentaciones para mantenerse fiel a su Padre? ¿Qué sientes al ver que el Hijo de Dios ha sido tentado como nosotros? Las tentaciones ¿oscurecen su condición divina o revelan mejor su encarnación y cercanía a los humanos?

La escena. ¿por qué los evangelistas sitúan al relato de las tentaciones antes de comenzar a narrar la actividad de Jesús? ¿Es un episodio aislado en su vida o un resumen sobrecogedorr de las pruebas que tuvo que ir superando a lo largo de su vida?

Las respuestas de Jesús. Leemos despacio las tres respuestas de Jesús al tentador. ¿Captas la fuerza con que defiende Jesús su fidelidad a Dios? ¿Son propiamente tentaciones de orden moral o experiencias donde se juega Jesús la trayectoria de toda su vida?

No solo sepan vive el hombre. ¿En que consiste esta primera tentación? ¿No es bueno confiar en Dios para resolver nuestras necesidades materiales? ¿Qué necesitamos las personas además de pan? ¿De qué se alimenta Jesús?

No tentaras al Señor, tu Dios. ¿En qué consiste esta segunda tentación? Según Jesús ¿qué seria tentar a Jesús? ¿Como vive Jesús a Dios? ¿Poniéndolo al servicio de su gloria o pensando en el sufrimiento de sus hijos e hijas mas necesitados?

Adoraras al Señor, tu Dios. ¿En que consiste esta última tentación? ¿Dónde esta la diferencia entre vivir adorado al diablo o adorando a Dios? ¿Qué es lo que motiva y dirige a Jesús? ¿Su deseo de poder para dominar o su amor para servir?

  • Comentario

Las tentaciones de Jesús
los cristianos de la primera generación se interesaron muy pronto por las tentaciones de Jesús. No querían olvidar el tipo de prueba, seducciones y luchas que tuvo que superar para para mantenerse a fiel a Dios. El recuerdo de las tentaciones de Jesús les aporta luz y fuerza para resistirse a las tentaciones de su tiempo, sin desviarse de su única tarea: construir un mundo mas humano siguiendo sus pasos.

La escena esta concebida como una discusión exegética entre Jesús y el diablo. Los dos emplean la Palabra de Dios y citan texts dela Biblia, incluso el diablo. No es difícil ver que esta especie de juegos de letrados no está describiendo  un episodio aislado, ocurrió en un lugar y en un momento concretos. Aquí se concentran las grandes tentaciones que ha experimentado Jesús durante toda su vida profética.

Las tentaciones no son propiamente de orden moral. Su verdadero trasfondo es mas profundo. El tentador pone a prueba la actitud última de Jesús ante el Padre: ¿cómo ha de vivir su tarea? ¿Buscando su propio interés o escuchando fielmente su Palabra? ¿Cómo ha de actuar? ¿Dominando a los demás o poniéndose a su servicio? ¿Cómo ha de orientar su vida? ¿Buscando su propia gloria o la voluntad de Dios? Las respuestas de Jesús son breves y concisas. Jesús responde destacado lo único necesario y esencial: la fidelidad de Dios.

La primera tentación acontece en el desierto, a ras del suelo. Después  de un largo ayuno dedicado ala búsqueda de Dios, Jesús siente hambre. Es entonces cuando se acerca el tentador para sugerirle algo bien inocente y bueno. Si es Hijo de Dios, ha de confiar en el Padre, pues sin duda, se preocupará de satisfacer las necesidades más básicas de su Hijo amado, incluso formas prodigiosa: Si eres hijo de Dios, manda que estas piedras se conviertan en panes.

Jesús, desfallecido pero lleno del Espíritu, reacciona con rapidez. No solo de pan vive el hombre , sino de toda palabra que salga de la boca de Dios. Se da cuenta el tentador le esta sugiriendo actuar pensando en si mismo y no en el proyecto de Jesús. No seguirá en ese camino. No vivirá buscando su propio interés. No utilizara a su Padre de manera egoísta. Se alimentará de la Palabra de Dios, Solo multiplicará panes cuando vea ala gente pasar hambre.

Ciertamente, lo primero que necesita una persona es comer. Pero las necesidades del ser humano no se satisfacen solo alimentando el cuerpo. Las personas necesitamos y anhelamos mucho más. Precisamente, para liberar del hambre, la miseria y la indignidad quienes no tienen pan hemos de escuchar a Dios, Padre de todos, para despertar en el mundo hambre de justicia , compasión y solidaridad con los últimos.

Siempre que los seguidores de Jesús buscamos nuestro propio interés, olvidándonos del proyecto de Dios, nos desviamos de Jesús. Siempre que sus seguidores anteponemos nuestro bienestar a las necesidades de los últimos olvidamos la Palabra de Dios, que nos llama a vivir como hermanos.

La segunda tentación tiene lugar en el alero del templo, probablemente una especie de mirador, en el muro exterior del templo, que daba hacia la hondonada del torrente Cedron. El tentador le propone hacer su entrada triunfal en la cuidad santa, descendiendo de lo alto como Mesías glorioso. ¿Puede haber un comienzo más digno y solemne para iniciar su actividad de Hijo de Dios? No ha de tener miedo de lanzarse al vacío. Dios es su Padre. Ha de confiar en él. El tentador le recuerda el Salmo 91. Los ángeles cuidarán de él y lo llevaran en sus brazos. No correrá ningún riesgo.

La respuesta de Jesús es contundente: No tentarás al Señor, tu Dios. No será un Mesías triunfador. Nunca podrá a Dios al servicio de su gloria. No buscará señales para impresionar alas gentes. Pondrá su poder curador al servicio de lso enfermos y desgraciados. Precisamente por que confía a en Padre asumirá todos los riesgos y peligros que sean necesarios. Cuando esté próxima su ejecución, no pedirá al Padre un ejército de ángeles que lo libere de la muerte. Seguirá su camino hacia la cruz. (Mateo 26, 53-54)

Es tentador utilizar a Dios viviendo la religión como un sistema de creencias y prácticas que proporcionan seguridad en medio de las dificultades de la vida. Sin embargo no es ese el camino para seguir a Jesús. Para colaborar en su proyecto del Reino de Dios es necesario superar la tentación de refugiarnos en la religión para salir ala vida y asumir compromisos a veces arriesgados, confiando en el Padre como él.

Siempre que los seguidores de Jesús ponemos a Dios al servicio de nuestra gloria, buscando nuestro éxito y superioridad por los demás, nos estamos desviando de Jesús. Cuando pretendemos seguirlo pensando que la practica de nuestros deberes religiosos nos dispensa del esfuerzo y el compromiso por un mundo mas humano y justo, nos alejamos de él.

Para la tercera tentación, el diablo lleva a Jesús a un monte muy alto. Desde allí le muestra todos los reinos del mundo con su gloria. Jesús puede intuir las guerras, las injusticias, abusos y sufrimientos sobre lo que se asienta esa gloria; por eso desea tanto instaurar el reino de paz y de la justicia de Dios. Sin embargo, de momento el diablo le dice que todo está controlado por él. Por eso hace la oferta asombrosa: le dará todo el poder y la gloria de ese mundo solo con una condición: Si te postras y me adoras. Jesús tendrá que seguir los caminos de abusos e injusticias que llevan a tener poder mundano.

Jesús reacciona violentamente: Vete, Satanás, porque está escrito: Adoraras al Señor, tu Dios, y solo a él darás culto. El Padre solo llama a dominar los reinos de la tierra al estilo del emperador de Roma. sino a servir a quieres viven oprimidos por los que tienen poder. El reino de Dios no se impone con poder, se ofrece con amor.

Es muy tentador andar tras el poder y la gloria al estilo de los poderosos de la tierra. Pero, si pretendemos seguir a Jesús por esos caminos, viviremos postrados ante el diablo; no adoraremos al verdadero Dios, al que sirve Jesús. Buscar el poder y la gloria olvidando el sufrimiento de los débiles, los humillados y los vencidos lleva a las idolatrías mas ridículas.

Los seguidores de Jesús hemos de ahuyentar cualquier tentación de poder, vanagloria y dominación, gritando con Jesús: Vete Satanás. El poder mundano es siempre una tentación diabólica. Cuando caemos en ella, nos estamos desviando gravemente de él.

  • Conversión Personal.

¿Conozco bien las tentaciones que me pueden apartar del seguimiento fiel a Jesús? ¿Qué es lo que más me puede alejar del Evangelio en estos momentos?

¿Siento a Jesús cercano en el momento de la tentación? Como es mi relación con él en el momento de prueba o de caída?  ¿Es Jesús mi mejor estimulo para cuidar mi fidelidad al Padre? ¿Me ayuda este grupo a vivir de manera mas lúcida y responsable?

Conversación con Jesús. Habla con el de tus tentaciones y luchas para seguirlo. Él sabe por experiencia lo que sientes.

  • Compromiso en el proyecto de Jesús

¿Cuales son las principales tentaciones que nos acechan hoy a los cristianos? ¿Qué es lo que mas nos puede desviar de Jesús y su Evangelio en medio de la sociedad actual? 

¿Como nos podemos ayudar mutuamente a cuidar antes que nada la fidelidad al Padre y  a su proyecto del reino? ¿Podemos concretar actitudes, gestos, reacciones, cambios necesarios…?

¿Podemos señalar entre todos cuáles pueden ser las tres tentaciones a las que hemos de estar más atentos para no desviarnos de nuestro proyecto de seguir de cerca a Jesús?

  • Sugerencias para la oración

Orar al final por que Dios nos ayude a ver las tentaciones que enfrentamos y nos de el querer como el hacer para seguir.